El cuidado de las corbatas comienza con su tratamiento después de su uso.
Es recomendable desatar la corbata y enrollarla suavemente comenzando por el extremo estrecho para evitar arrugas y pliegues.
Si la corbata todavía parece arrugada al día siguiente -lo cual rara vez sucede con corbatas de alta calidad- se deben tratar las arrugas solo con vapor, pasando la plancha cerca de la corbata sin tocarla. Otra opción es dejar correr agua caliente en la bañera y colgar la corbata en el vapor.
El almacenamiento de las corbatas es otro factor importante para su cuidado. En general, no se deben almacenar demasiado juntas en el armario, para permitir suficiente circulación de aire. Además, necesitan protección contra la luz solar, el polvo, la humedad y, si es necesario, las polillas. La mayoría de los hombres guardan sus corbatas colgando de una percha o dispositivo de suspensión especial. Hay que tener cuidado de que no haya bordes afilados que puedan dañar el tejido.
Las corbatas de punto son una excepción, ya que tienden a estirarse. Siempre deben colocarse planas o enrolladas. Un cajón propio para las corbatas enrolladas y ordenadas es una medida recomendable para evitar largas búsquedas en el armario.
En los viajes, las corbatas pueden ser simplemente dobladas y empacadas de manera que no se arruguen. Alternativamente, las corbatas enrolladas se pueden colocar en los huecos entre las prendas de vestir o en los cuellos de las camisas para mantenerlas en forma. Incluso después de desempacar la maleta, los baños de vapor y un breve enrollado pueden hacer maravillas si se han formado algunas arrugas.
En caso de manchas, las corbatas no deben limpiarse a menos que sea absolutamente necesario. Las corbatas de alta calidad solo deben confiarse a una buena limpieza para evitar la pérdida de volumen. La prevención es la mejor medida, por lo que las corbatas de seda clara y estampadas deben guardarse en el armario durante los viajes o las cenas de negocios, ya que incluso las pequeñas salpicaduras en tales corbatas son notorias.
Una corbata de seda hecha a mano de buena calidad puede durar casi para siempre, siempre que se le dé un buen tratamiento y se almacene correctamente. Es más bien una decisión de moda si se sigue usando una corbata. Una corbata un poco desactualizada puede ser guardada con la esperanza de que vuelva a estar de moda algún día.
Pero en general, cuanto más se use una corbata, más rápido mostrará signos de desgaste. Por lo tanto, se recomienda tener una selección más grande de corbatas y cambiarlas regularmente para prolongar la vida útil de cada una.
En general, el cuidado de las corbatas es un asunto importante para asegurarse de que estos accesorios duren mucho tiempo y siempre luzcan en óptimas condiciones. Con el almacenamiento adecuado, el tratamiento después de usarlas y la limpieza ocasional, se puede asegurar que una corbata siempre se vea como nueva y esté lista para ser usada.
Además, es es importante recordar que las corbatas deben ser elegidas en función del tipo de evento o de la ocasión, de manera que se complementen adecuadamente con la ropa y el ambiente en el que se utilizarán. Las corbatas con patrones llamativos o colores brillantes pueden ser apropiadas para eventos informales o para mostrar un estilo personal, mientras que las corbatas de seda de tonos más sutiles y patrones más simples son más adecuadas para eventos formales o de negocios.
En general, cuidar de las corbatas puede parecer una tarea tediosa, pero vale la pena el esfuerzo. Con una buena atención y mantenimiento, se pueden extender la vida útil de las corbatas y mantener su apariencia elegante y sofisticada. Además, el cuidado adecuado de las corbatas también es una señal de respeto por la inversión realizada en estas prendas y por el esfuerzo de vestirse con estilo y elegancia.
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